La eliminación de barreras arquitectónicas, el equipamiento industrial e instalación de automatismos son soluciones técnicas que ofrecen mejoran la calidad de vida de todas aquellas personas con movilidad reducida que encuentran en su entorno dificultades de accesibilidad que impiden su desarrollo personal.

España es uno de los países con mayor esperanza de vida del mundo, junto con Italia y Japón, por encima de los 80 años y concretamente la provincia de Salamanca, con una tasa de población mayor de 65 años del 25,62% (86.417 mayores), es la quinta provincia más envejecida de España, algo por lo que se hace necesario implementar medidas de apoyo para los  miembros de la denominada “cuarta edad” o quienes por causas accidentales o genéticas sufren de una movilidad reducida o parcial.

Una solución para cada necesidad

Existen numerosos equipos salvaescaleras y de mejora para tareas diarias en la vida de personas con movilidad reducida, para facilitar la labor de los cuidadores de dichas personas y para conseguir que el día a día de muchas personas sea más cómodo e independiente debemos buscar la mejor de las soluciones en base al presupuesto que podemos manejar.

• Sillas salvaescaleras, que pueden ser utilizadas tanto en tramos rectos como curvos, de interior o de exterior. Su instalación es rápida y sencilla y no requieren realización de obra ya que van ancladas al suelo.
• Plataformas salvaescaleras pueden ser utilizadas tanto en tramos rectos como curvos, y su instalación también es posible tanto en interior como exterior. Estos equipos están especialmente indicados para usuarios de sillas de ruedas, además de ser útiles y cómodos para cualquier persona.
• Los elevadores verticales son ideales para viviendas ya que existen cabinas en múltiples tamaños y configuraciones, dependiendo de lo que el cliente necesite o las medidas que tenga el hueco a emplear. Son de muy bajo consumo eléctrico si se comparan con un ascensor convencional.
• Los llamados montaescaleras son un elevador móvil para escaleras que permite a las personas en silla de ruedas superar las barreras arquitectónicas en los desplazamientos tanto domésticos como externos, sin ninguna instalación fija, y aunque necesita del apoyo de otra persona es realmente práctico ya que no requiere ninguna instalación fija y permite recorrer todo tipo de escaleras, eliminando el riesgo de dañarlas con el uso, gracias a su oruga prensil de goma.

Evidentemente la elección dependerá del presupuesto, las posibilidades de instalación y el nivel de movilidad del usuario.